En esta segunda parte os traigo otros dos casos de vampiras de Nueva Inglaterra. Estos son de los más significativos y documentados que existen. Sin embargo existen infinidad de ellos y en aquella época gran cantidad de familias tenían una vampira entre sus difuntos.
La vampira Ruth Ellen Rose
William Rose era un líder cívico que vivía en la zona de Nueva Inglaterra. Estuvo casado con Mary Rose Taylor pero enviudó, quedando como fruto de ese amor sus dos hijas Ruth Ellen y Rosalind. Tiempo después contrajo segundas nupcias con Mary Rose Nee Griswold, viuda también. Todo iba bien en la familia hasta que Ruth Ellen, la hija mayor de 15 años cayó gravemente enferma, el diagnóstico era consumption. Por desgracia, la joven fallece en 1874 dejando un profundo dolor en la familia.
Sin embargo, la desgracia continúa, ya que al poco tiempo, la pequeña Rosalind de siete años es víctima del mismo mal que su hermana. La niña relata que por las noches tenía terribles pesadillas en las que veía a Ruth Ellen. William, conocedor de las historias de vampiros que circulaban por la localidad, fue a pedir consejo al reverendo Amos Cabot. El religioso no cree que el problema sea causado por algo sobrenatural y trata de convencer sin éxito a William.
El padre, desesperado, busca a otras personas cuyas familias estén siendo afectadas por el mismo mal. Una mañana, un granjero de la localidad le dice que le pareció haber visto a Ruth Ellen merodeando afuera de su casa por la noche. sospechaba que se había transformado en una vampira. El hombre describió con exactitud la ropa que llevaba, que era aquella con la que habían sepultado a la joven. Este detalle hizo que William le creyera, ya que solo la familia vio a la chica en el ataúd.
William sabía que tenía que hacer algo para salvar a su pequeña hija y la respuesta la obtuvo de su segunda esposa. Mary había estado casada con Thomas Thillinghast, nieto de Stuckley Tillinghast, por ello conocía el caso de Sarah.
Esa noche, el hombre soñó que se encontraba en medio del cementerio donde estaba sepultada Ruth Ellen. De repente, apareció ante él su hija, lucía pálida y delgada. Con voz suplicante le decía: “Padre, tengo tanto frío. Abrázame padre para que pueda recuperar el calor”. Veía que la chica temblaba y sudaba, así que su reacción fue acercarse a abrazar a su hija. En el momento en el que se dirigía hacia la muchacha, William despertó sobresaltado.
Esa mañana, William acompañado por dos o tres hombres, fue al cementerio, a la tumba de Ruth Ellen Rose. La desenterraron y vieron que sus ropas estaban ligeramente manchadas de sangre. Haciendo de tripas corazón y dando gracias por que su hija tenía el rostro cubierto por el velo, abrió el cadáver. Extrajo el corazón de la joven y lo quemó tal como indicaba el ritual y después volvió a sepultarla. Después de llevar a cabo esta acción, Rosalind recuperó la salud y la familia recuperó la tranquilidad aunque en Nueva Inglaterra, los vampiros seguían acechando.
La vampira Mercy Lena Brown
George Brown y su esposa Mary Eliza eran unos granjeros de la zona de Nueva Inglaterra. Su trabajo les permitía vivir tranquilamente junto a sus hijos. La vida marchaba tranquila hasta que un día de 1881 Mary Eliza cae gravemente enferma y fallece a causa de la epidemia de consumption. Pocos meses después, la joven Mary Olive de 17 años, hija del matrimonio, también enferma. La chica relataba que por las noches tenía pesadillas en las que sentía que “algo” se subía encima de ella y no la dejaba respirar. Por desgracia fallece dejando a la familia sumida en un profundo dolor.
Pasaron los años y los Brown continuaron con sus vidas, Edwin, el hijo mayor se casó y se marchó a vivir a Withform. Sin embargo, la tragedia volvió a ensañarse con la familia, cuando el joven cayó enfermo de consumption. Su padre decide enviarlo a Colorado Springs con la esperanza de que recupere la salud.
La idea fue buena y tras un año de estancia Edwin mejora. Sin embargo decide volver a casa cuando se entera de que su hermana Mercy Lena de 19 años está gravemente enferma. Consumption fue especialmente agresivo con la chica y el 17 de enero de 1892 fallece. Debido al duro clima, Mercy tuvo que permanecer en una cripta de congelación hasta que se pudiese excavar una tumba en el suelo.
Poco después del deceso de la joven, Edwin recae y relata a su padre que su hermana se le aparece en sueños y le dice: “Edwin dame de comer. Tengo hambre y frío”. Las cosas se complicaron cuando algunos vecinos y jornaleros también comenzaron a enfermar. Además, relataron al granjero haber visto a Mercy merodeando en las afueras de sus hogares.
George, no estaba convencido de que Mercy Lena se hubiese transformado en vampira. Sin embargo, decide hacer caso a las sugerencias de exhumar las tumbas de su esposa e hijas. El 18 de marzo de 1892, acompañado de algunos hombres, el granjero acude al cementerio a llevar a cabo la desagradable labor. Mary Eliza y Mary Olive presentaban los signos normales de descomposición. Pero cuando vieron el cadáver de Mercy Lena quedaron sorprendidos, ya que la joven lucía rozagante, como si estuviera sumida en un sueño. Sin duda ella era la vampira.
Armados de valor, abrieron el cuerpo, extirparon en corazón, lo quemaron y volvieron a sepultar el cadáver. Las cenizas del órgano se añadieron a las medicinas de Edwin con la esperanza de sanarle, pero fue en vano. Sin embargo, el resto de afectados recuperó la salud.
Notas finales
Mercy Lena Brown es conocida como “la última vampira de Nueva Inglaterra”. Sus restos se encuentran en el cementerio de Chestnut Hill y su lápida protegida de vándalos por una malla metálica. Hubo muchos más casos de vampiros en la región, como el de Nancy Young o Nelly Vaughn.
Aquellos que deseen profundizar en el tema, una buena opción la tienen en el libro de Michael Edward Bell: Food for the dead: On the trail of new England’s vampires. En este podrán encontrar una interesante recopilación de casos de vampiros.
Llama la atención que en su mayoría, los vampiros son chicas jóvenes que mueren rápidamente por la misma enfermedad. Además, casi todas, se manifiestan a sus familiares en sueños y siempre tienen frío. Quizás cuando los primeros colonos llegaron a las costas de Estados Unidos no iban solos. Tal vez, alguna criatura los acompañó desde Gran Bretaña e hizo de las nuevas tierras su hábitat. Y quizás, sólo quizás, este ser aún se encuentre en algún lugar, merodeando, acechando en las sombras y buscando nuevas víctimas.
Si te ha gustado este artículo y te interesa conocer a otros vampiros, entonces he de decirte que en México se cree que uno de estos seres está enterrado en un cementerio. Si deseas saber más acerca del vampiro del panteón de Belén, solamente haz click aquí.
Por cierto, si la temática de vampiros es lo tuyo, permíteme que te recomiende una buena novela de no muertos, se trata de Carmilla y aquí te dejo la reseña.